Yo soy de los que opina que un margen de 2 ó incluso 3 décimas arriba o abajo, hablando de neumáticos normales y motos normales, y dándoles un uso normal, con presiones de referencia en torno a entre 2,5 y 3 bares (como es el caso), no es crítico en ningún aspecto. ¿Se nota?. Pues imagino que depende de la sensibilidad de cada cual... Vamos: al menos yo nunca he notado ni una mejoría brutal por pasar -por decir algo- de 2,6 a 2,8 bares o viceversa...
Al margen de lo anterior, preguntas por la parte negativa de ir por encima de la presión óptima. Hay varios aspectos:
1.- El neumático no se deforma lo que debe y por tanto en su contacto con el asfalto la superficie de contacto es menor. Los fuerzas tangenciales (longitudinales de aceleración y frenado, transversales al cambiar de dirección, y por lo general una combinación de ambos) se reparte en menos superficie, aumentando así los esfuerzos unitarios (por cada cm2) a soportar por la goma. Y estos esfuerzos tienen un límite, con lo que más cerca de dicho límite andaremos. Al llegar y pretender superar dicho límite llega la pérdida de adherencia con las consecuancias que sean (desde un derrapaje controlado, hasta una galleta).
2.- También ocurre que la adherencia del neumático al asfalto depende de la temperatura de ambos. La del asfalto no está en nuestra mano, pero la de la goma en parte sí. Una de las fuentes de calor que elevan la temperatura de la goma es la continua deformación de la misma al pasar al ser en cada momento una sección la de apoyyo sobre el asfalto, para ser inmediatamente la sección posterior... y así constantemente. Una mayor presión de inflado lleva menor deformación y por tanto menor calentamiento, pudiendo no llegarse a alcanzar la temperatura óptima, disminuyendo de nueva la adherencia.
3.- La duración del neumático, por desgaste, por una parte disminuye con la temperatura (la goma se ablanda cuanto más caliente está, y más se degrada) pero por encima de esto está la tensión tangencial / rozamiento con el asfalto (mayor con sobrepresión). Con una presión excesiva aumentará el desgaste; en una banda más estrecha (la que toca con el asfalto), pero de forma bastante más rápida.
4.- La deformabilidad del neumático colabora con la suspensión y amortiguación a "filtrar" las irregularidades de la carretera. Un exceso de presión tienen una doble vertiente:
[*=1]a.-. Por un lado disminuye el confort, al hacerse los neumáticos más "rígidos" y colaborar menos en dicho filtrado de irregularidades de la carretera.
[*=1]b.- Además en caso de irregularidades de alta frecuencia y poca amplitud (por ejemplo, un calle de adoquines) los neumáticos, por haber perdido capacidad de deformación y por tanto de adaptación al firme, también tienden a rebotar y perder contacto con el suelo. Hablamos de centésimas, quizá milésimas de segundo, pero eso habría que evitarlo.
...
Todo lo anterior se acentúa cuanto mayor es el exceso de presión. Como decía al inicio, en mi opinión una sobrepresión de 0,2 ó incluso 0,3 bares no es trágica e incluso suele estar dentro de los errores de los manómetros que solemos encontrar en las estaciones de servicio. Otra cosa sería hinchar con sobrepresiones de 0,5 bares, o más, en cuyo caso sí que ya vamos más que pasados.
Vsss