Siguiendo con el off-topic (disculpas), tengo una amiga de muchos años cuya hermana se casó y se fue con su marido también español a vivir a Japón porque encontraron trabajo estable.
Me contaba muchas veces que cuando venían de vacaciones a España se volvían un plomazo porque no soportaban la "suciedad", el ruido, la mala educación de la gente en los espacios públicos, etc. Ya sabéis, somos como somos. Pero de tal forma que llegó a pensar que mejor que no vinieran más, porque lo pasaban mal ellos y mi amiga también soportando sus quejas.
Eso sí, hablé con mi amiga hace pocos meses y me contó que su hermana se había vuelto de Japón después de más de veinte años y que ya vivían aquí.
Ya imagino que Japón tiene defectos como todos los países. Una sociedad con un funcionamiento tan cuadriculado tiene que requerir un sacrificio a todos los niveles que no sé si asumiríamos aquí. Y ese esfuerzo y esa presión a lo mejor tiene su cara oscura. No lo sé. Para saberlo habría que vivir allí y entrar en su sociedad.
Lo que sí sé es que es de los pocos países en los que iría a la policía sin ningún temor. Todo funciona de fábula. Y la gente no es fría.
Una anécdota más y paro.
Andando por Tokio mapa en mano (no existían smartphones, principios de siglo), buscábamos una estación de metro en un distrito empresarial. Tokio es un monstruo tan grande como moderno. El ayuntamiento equivale por tamaño a un ministerio de los de aquí. Pregunté a un joven con traje (veintipocos) con mi inglés terrible por la boca de metro señalándola en el mapa. El chico nos miró y nos dijo: "let's go!". El hombre empezó a caminar rápido para que le siguiéramos. Le seguimos y en un momento dado pasamos por delante de un edificio moderno y señalándolo nos dijo orgulloso: "my company", y seguimos pasando de largo. Nos llevó hasta la misma boca del metro y se despidió con una pequeña reverencia. Nos deshicimos en "thank you" y vimos como volvía por el mismo camino rápidamente porque posiblemente iba con el tiempo justo. Mi pareja y yo nos miramos con una mezcla de grata sorpresa y admiración.
Son muy buena gente y el nivel de educación y hospitalidad está por las nubes.